No es a él. Es a mí a quién extraño. La sonrisa en el alma, la magia en el aire, el fuego en la panza. Esas cosas que me pasaban, y ahora no. Eso pensaba...
Pienso ahora: en algún lado tienen que estar guardadas todas esas cosas. Él se niega a abrirme. Yo me estoy cansando de forzar la puerta sin éxito. Será cuestión de buscar a otro fulano que tenga la llave del depósito y voilá!
"No sos vos, soy yo..."
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2 comentarios:
Me parece casi de mal gusto ese título emulando mis escritos, cuando todo lo de abajo no es más que una manga de pavadas. Mirá que soy buena onda eh? pero la verdad...
Tenés razón. Me llamo a silencio.
Cortazar je t'aime!
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